ANDREA GIUNTA
DIVERSIDAD Y ARTE LATINOAMERICANO
SIGLO VEINTIUNO EDITORES
Páginas: 256
Formato:
Peso: 0.31 kgs.
ISBN: 978-987-801-322-0
¿Qué es normal en la vida y en el arte? ¿Qué es normal en la sexualidad, en la academia, en el museo? El arte, con su potencia de ruptura y extrañamiento, ha sido siempre un espacio privilegiado para poner en tensión las reglas sociales de la normalidad. Para revelar en imágenes la complejidad de un mundo vasto y diverso. Y, sin embargo, ¿es capaz de cuestionar sus propias normas, sus vías de consagración, sus instituciones, sus públicos? Diversidad y arte latinoamericano se detiene justamente allí, para recorrer la obra de artistas que, de distintas maneras, rompieron el techo de cristal, quebraron las limitaciones que dificultaban su visibilidad, transgredieron el canon. El arte de América Latina fruto de la multiplicidad que tramaron las experiencias de la colonialidad, la independencia, la América indígena, la América negra, las vanguardias es también expresión de afectos, culturas y creencias minorizadas. Con minuciosa atención a la especificidad de las imágenes, pero sin perder de vista su capacidad de producir efectos políticos, Andrea Giunta recorre el escenario del arte latinoamericano entre los años sesenta y el presente. Entre Argentina, Chile, Brasil, México, Colombia, Uruguay, Paraguay y Perú, las experiencias que aborda (algunas individuales, otras colectivas) se piensan como emergentes de esas fuerzas contenidas. Desde su singularidad, las trayectorias analizadas transforman poéticas establecidas a la vez que logran interpelar sus contextos y proponer agendas: discuten el lugar de la mujer en la sociedad, las fronteras que imponen la raza o la edad, interrogan las miradas capacitistas, traen a escena formas de la sexualidad que escapan a lo normativo. Como en Feminismo y arte latinoamericano, la autora cuenta la historia de una revolución en curso, una en la que imaginar y representar el mundo desde subjetividades y formas de conocimiento disidentes supone disputar espacios y combatir mecanismos de exclusión largamente afianzados. Pero también multiplicar públicos y expandir lo sensible.